viernes, 3 de junio de 2011

Caravana del Consuelo Por Miguel Ángel Granados Chapa



PLAZA PÚBLICA

Mañana parte de Cuernavaca la Caravana del Consuelo, como la ha denominado su principal impulsor, Javier Sicilia. Concluirá el 10 de junio en Ciudad Juárez, donde será firmado un pacto entre organizaciones de la sociedad civil, que reclaman cambiar el enfoque de violencia estatal en el combate a la delincuencia organizada por otro que privilegie la seguridad de los ciudadanos. El documento será presentado posteriormente al presidente Calderón y otras autoridades.

La caravana recorrerá la Ruta del Dolor. Comienza, como lo hizo la Marcha Nacional por la Paz con Justicia y Dignidad, en Cuernavaca. Mañana mismo cruzará el Distrito Federal y pernoctará en Morelia. De allí seguirá el domingo a San Luis Potosí. El lunes 6 llegará a Zacatecas y Durango. El martes 7 continuará de San Luis a Saltillo y a Monterrey. El miércoles 8 se cumplirá una de las etapas más largas: de Monterrey a Torreón y de allí a Chihuahua. El jueves 9 llegará de la capital del estado a Ciudad Juárez. El viernes 10 en esa localidad tan lastimada aun en los tiempos en que disminuye la mortandad, se firmará el pacto en que convergen varios centenares de organizaciones de la sociedad civil. (Al día siguiente habrá dos como extensiones de la reunión principal: un acto en El Paso, Texas, en solidaridad de grupos norteamericanos con el Movimiento, y el retorno de los participantes a Torreón, de donde volverán a sus puntos de origen).

Entre el 8 de mayo y el día de mañana la marcha que comenzó hace un mes en la capital de Morelos ha ido consumando su conversión en Movimiento. Ha adquirido perfiles al mismo tiempo más nítidos y más amplios. Ya caracterizaba a esta movilización, originada por el asesinato de Juan Francisco Sicilia y seis personas más, una certeza en los fines y una gran heterogeneidad en los enfoques. A tal grado llega esta última, que es riqueza y no debilidad del Movimiento, que no faltó la queja, casi con aire de denuncia, de una sobresaliente activista por la justicia penal, que habló de "infiltrados" en la marcha. La expresión carece de sentido en una movilización incluyente, caracterizada por las puertas abiertas, a cuyas filas acude toda persona que tenga una queja y una demanda que ventilar. Ciertamente hay exigencias centrales, la seguridad y el fin de la violencia, pero en torno de ellas se despliegan multitud de otras demandas, porque la movilización es una especie de foro móvil.

En él bullen simultáneamente la deses- peranza y la esperanza, la indignación y el dolor, la certeza de que no hay nada que hacer frente a la impunidad, y la certidumbre de que mucho puede hacerse desde el vigor ciudadano. De allí que los críticos de Sicilia y el Movimiento, los acusen de dejarse manejar por indefinidos intereses, distintos de los evidentes móviles que los impulsan, y se hayan dolido fingidamente de que movimientos diversos se "montaron" en la muy respetable causa del poeta para figurar y hacer valer su propia agenda. Ignoran que eso está en la naturaleza misma de las cosas y no es un artero aprovechamiento de la capacidad de convocatoria y de organización de Sicilia y de quienes lo acompañan.

Como se aprecia en el trazo de la ruta, se transitará por caminos y calles en que se ha concentrado de modo particular la destrucción de la convivencia y se han librado combates cruentos de bandas entre sí y de fuerzas del Estado contra esas bandas con grave daño a la sociedad. Se trata sin duda de un mapa incompleto. No se tocarán, por razones logísticas, entidades como Tamaulipas, Sinaloa, Guerrero, Nayarit, Jalisco, Veracruz, Tabasco, Oaxaca, etcétera, donde la delincuencia organizada y el combate contra ella, y otras formas de violencia, causan decenas de miles de muertos. Pero ninguna de las víctimas en los estados recorridos, en las entidades mencionadas y en el resto de la República está fuera del pensamiento de Sicilia y los organizadores del Movimiento.

Porque de eso se trata, de trascender la frialdad de las cifras, para conocer a cada una de las personas cuya vida ha sido segada en estos años de plomo canalla. Con tino poético y sociológico, Sicilia propone descubrir detrás de los números -"meras abstracciones estadísticas en el imaginario administrativo"- los "rostros, (las) historias mutiladas y (las) familias rotas". De ese modo el activista y poeta invita a un necesario ejercicio criminológico y social: se precisa saber quiénes eran los muertos inocentes y los reputados como delincuentes, para determinar el momento y las causas de su transformación, para evitar que haya otras similares: saber qué condujo, qué empujó a niños y adolescentes; que pudieron tener otro destino, a distribuir droga, a empuñar armas para proteger el negocio de los enervantes y a sus jefes, a servir en las muchas tareas adyacentes que la clandestinidad reclama.

Tras presentar el martes la Ruta del Dolor, junto con sus compañeros promotores del Movimiento, Sicilia viajó a San Francisco, a recibir el premio "People's Choice" que anualmente otorga Global Exchange, un organismo de defensa y promoción de derechos humanos. Dijo allí que las causas del horror que padecen muchos mexicanos "son múltiples y profundas. Son el resultado de una guerra absurda, del largo pudrimiento de las instituciones de México y de la irresponsabilidad política de Estados Unidos que, para mal evitar su consumo de droga, ha instalado en México una guerra que no ha disminuido en nada ni el tráfico ni el consumo y que nos está costando miles de muertos y desaparecidos".

 
Cajón de Sastre
 
Tocó a Manlio Fabio Beltrones, como presidente de la Mesa Directiva del Senado, hacer la declaratoria de consumación de la reforma constitucional en materia de derechos humanos. La mayoría de las legislaturas, tal como lo demanda la propia Constitución, ya la aprobó. Sumaron 21 las Cámaras locales que votaron a favor, nueve no lo han hecho hasta ahora (en la mayor parte de los casos porque se hallan en receso y no juzgaron que el asunto fuera tan importante como para citar a una sesión extraordinaria). Sólo el Congreso de Guanajuato se opuso a la reforma, juzgada excesiva por el conservadurismo católico. Diversas consecuencias legislativas se desprenden de la reforma constitucional, y cabe esperar semejante resistencia en el Congreso de la Unión, atizada además por los conflictos internos de las bancadas y los que enfrentan a éstas.

 
miguelangel@granadoschapa.com



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Fecha de publicación: 3 Jun. 11

La guerra ha fracasado Por Carmen Aristegui F.



Diario Reforma 3/06/2011

Ha iniciado una batalla frontal en contra de la Guerra a las drogas. Desde un panel de alto nivel internacional se empuja una postura que pretende cambiar los ejes de las políticas antidrogas en el planeta. Es de esperarse que el debate se extienda y, de prosperar, implicaría la transformación radical del actual régimen mundial de prohibición de las drogas. Al darse a conocer el informe de la Comisión Global de Políticas de Drogas, suscrito por figuras de alcance internacional, las reacciones no se han hecho esperar. El corazón de la discusión lo han colocado desde una perspectiva implacable y retadora: "la guerra global a las drogas ha fracasado, con consecuencias devastadoras para individuos y sociedades alrededor del mundo". Ni más, ni menos. Los que firman quieren romper el tabú y sacudir la apatía que encuentran en el debate de las políticas antidrogas en el mundo; "...los políticos comprenden que las actuales políticas y estrategias están fracasando pero no saben qué hacer a cambio". Pretende mover las conciencias y confrontar a los poderes al decir que, con el enfoque actual, miles de millones de dólares se seguirán desperdiciando cada año en programas ineficaces, millones de ciudadanos serán enviados a la cárcel innecesariamente y millones más seguirán sufriendo por la dependencia de sus seres queridos sin poder acceder a servicios de salud y asistencia social, además de que cientos de miles de personas seguirán muriendo por sobredosis evitables y enfermedades contraídas por el uso inseguro de drogas. Retan a los gobiernos porque, afirman, la gran tentación es evitar el tema y eso, desde el poder, es una clara abdicación de la responsabilidad política. Lo dicen ellos, cuya mayoría tuvo las más altas responsabilidades políticas. El documento está puesto para desnudar la existencia de políticas y estrategias orientadas por la ideología nacida de que esto es una guerra, y la conveniencia política en lugar de otras determinadas por políticas económicas responsables basadas en la ciencia, la salud, la seguridad y los derechos humanos que incluyan la adopción de criterios apropiados para su evaluación. El grupo es poderoso y no puede ser ignorado. Los gobiernos empiezan a pronunciarse: la Casa Blanca rechazó los planteamientos del panel y se mantuvo en que el control de las drogas seguirá porque "afecta nuestra economía, la salud y la seguridad pública". El gobierno de México, igual de apresurado y epidérmico, manifestó, esencialmente, su postura de rechazo. El documento es claro, directo, informado y demoledor. Merece algo más que esas respuestas de paso. Firman personajes que han tenido responsabilidades públicas de alto nivel o cuya estatura intelectual es reconocida: George Shultz, ex secretario de Estado de EU; Javier Solana, ex alto representante de la Unión Europea; Kofi Annan, ex secretario general de la ONU; Paul Volcker, ex presidente de la Reserva Federal de EU; la ex presidenta de Suiza, Ruth Dreifuss; el ex ministro Thorvald Stoltenberg; los ex presidentes Cardoso, Gaviria y Zedillo; Carlos Fuentes, Vargas Llosa y Richard Branson, el empresario británico y fundador del Grupo Virgin, también, entre otros. Piden algo a lo que nadie debería negarse: que se revise lo sucedido a 50 años de la Convención Única de Estupefacientes, y lo ocurrido a 40 años de que el presidente Nixon lanzara la guerra a las drogas del gobierno norteamericano. A la luz de la realidad que hoy se vive en el mundo y en países como México es claro, como dice este informe, que se necesitan urgentes reformas fundamentales en las políticas de control de drogas nacionales y mundiales. Sólo para ilustrar este imperativo, baste ver el cuadro comparativo del informe en lo que a consumo se refiere. De 1998 a 2008 (con información de Naciones Unidas) hay un incremento en el consumo de opiáceos en 34.5%, de cocaína en 27% y de cannabis en 8.5% a nivel mundial. Otros indicadores adversos sobre los efectos de políticas prohibicionistas y criminalizantes que invitan a repensar seriamente el tema los tenemos en México, especialmente en el tema de la violencia y descomposición institucional. Del gobierno de México, lastimosamente ejemplo de lo que se dice en el documento, se esperaría -en lugar de salir al paso con dos cuartillitas de respuesta- una actitud receptiva y abierta para participar activamente, dentro y fuera del país, en esto que se presenta como un debate inevitable y absolutamente necesario.




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Fecha de publicación: 3 Jun. 11

lunes, 30 de mayo de 2011

Marcha por la Paz Tabasco

marcha por la paz en Tabasco por Juan de Jesús Lópezmarcha por la paz en Tabasco por Juan de Jesús Lópezmarcha por la paz en Tabasco por Juan de Jesús Lópezmarcha por la paz en Tabasco por Juan de Jesús Lópezmarcha por la paz en Tabasco por Juan de Jesús Lópezmarcha por la paz en Tabasco por Juan de Jesús López
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Marcha por la Paz Tabasco, un álbum en Flickr.

comparto imagenes capturadas por Juan de Jesús López de la pasada Marcha por la Paz, con justicia y Dignidad, que se celebro el 8 de mayo en Villahermosa, Tabasco

A través de Flickr:
Fotos capturadas por Juan de Jesús López